miércoles, mayo 31, 2006

El valor de la atención al cliente. Chapó por Gröhe

Hace 15 días se me estropeó el grifo termostático de la ducha. Simplemente, dejó de regular correctamente el caudal de agua. Sin embargo, todavía regulaba bien la temperatura. Este grifo lo compré hace ahora 2 años. Y mira por donde soy bastante meticuloso en esto de guardar los tiquets de compra de todo aquello que supera una cierta cantidad de dinero (en este caso 30.000 de las antiguas pesetas).

Ni corto ni perezoso, y aún habiendo pasado 2 años, me voy a mi archivador donde guardo todas las facturas de compra y comienzo a buscar. Al cabo de unos minutos, doy con el tiquet de compra, uno de esos tiquets cuyo contenido se acaba borrando con el paso del tiempo. Era casi irreconocible lo que decía, pero se podía leer prestando mucha atención y fijándose bien. Cojo el teléfono de la tienda y llamo. Me dicen que tiene 5 años de garantía, pero que debo desinstalar el grifo (quiero decir, sacarlo, jeje), y llevarlo a la tienda. Entonces lo enviarán al servicio técnico para que lo reparen. Les pregunto si eso es así en otras marcas, y me dicen que en casi todas es así, excepto en algunas como por ejemplo Supergrif, que vienen a tu casa y te lo arreglan insitu.

Bueno, de todas maneras todavía me queda el poder ducharme en la bañera del otro lavabo, así que...... adelante, lo saco y lo llevo a la tienda. Hoy he ido a buscarlo (me llamaron hace un par de días). Pues bien, cuando llego a casa, lo saco del embalaje en el que viene y veo que.......... es un grifo NUEVO, no está reparado. Impresionante. Después de 2 años me han cambiado un grifo usado por uno nuevo. Es algo que no ocurre todos los días, por lo que quiero dejar constancia del buen servicio al cliente de Gröhe. La única pega es el tema de tener que llevarlo, porque si sólo tienes un baño es todo un problema, pero ha valido la pena.

Conclusión: recomendaré esta marca y seguiré siendo fiel a la misma. Así son las cosas, tienes buen servicio, luego tienes tu recompensa, un cliente fiel.

Nos vemos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues menos mal que en esta ocasion no tuviste que hacer ningun agujero en la pared para desmontarlo ;-P